La historia de los gatos

El gato doméstico -Felis catus es su nombre científico- es una subespecie de mamífero carnívoro de la familia de Felidae. Se cree que está en convivencia con el ser humano desde hace unos 9.500 años. A modo coloquial se les llama minino, micho o incluso mizo. A la hora de hablar del origen de la especie se pueden seguir dos caminos: uno el de la leyenda y otro el de la historia. Los dos son, les aseguro interesantes e incluso entretenidos.
ANTEPASADOS
Desde los antiguos mamíferos depredadores, hasta los felinos actuales, el principal motor evolutivo ha sido la necesidad de alimentarse de otros animales y superar la exigente selección natural. Los antepasados del gato no se diferencian demasiado de los que existieron hace 10.000 años, momento de la historia en que aparece el Felis silvestris o gato montés.
FAMILIARES
Si hacemos un recorrido por los felinos, sus géneros y variedades, podemos encontrar las relaciones genéticas o de parentesco del actual gato doméstico:
Grandes felinos: jaguares, leopardos, tigres, leones y panteras; comparten con el gato muchos aspectos de su conducta, aunque la mayor diferencia es el hábitat donde viven.
Pequeños felinos: lince, puma, ocelote, gato, o margay pertenecen al género Felis. De hecho, muchos son muy parecidos en aspecto y tienen mucha coincidencia genética, aunque no son similares en carácter.
Las similitudes entre el gato montés y el gato doméstico son tantas que los expertos debaten si son especies distintas o son variedades del Felis silvestris. De hecho, pueden cruzarse entre sí pero el resultado será difícilmente domesticable.